El grupo llega ilusionado el primer día del curso que les queda para licenciarse pero Jeff tiene que anunciarles que ha estado estudiando todo el verano para adelantar su graduación y tan solo le queda una clase para conseguirlo. Para su desgracia, el decano ha descubierto que alguien ha falsificado los créditos para la clase y ahora el que quiera inscribirse tendrá que ganarse el sitio en unos duros juegos. Salvo en la mente de Abed, donde las cosas suceden de forma distinta.