Baleado en el pecho, Henry Taylor pelea por su vida en el Hospital West Arlington, obligando a la Presidenta Taylor a ponerse en contacto con su hija enemistada. Jack, Renee, y Chloe intentan usar a la novia de Dubaku para aprehenderlo antes de que abandone el país, pero sus esfuerzos son frustrados por un agente corrupto trabajando dentro del mismísimo FBI.