Después de realizar una broma que involucra gatos y una total evacuación, Reese se va de la casa y se muda a su propio apartamento, consiguiendo también una tarjeta de crédito. Francis le reclama a Hal y a Lois el hecho de que no se interesen por traer a Reese a casa. Hal y Lois van a terapia para ser mejores padres. Ellos se enteran de que Reese sacó A en su último examen. Cuando van a felicitarlo, se enteran de su tarjeta de crédito, y Reese es regresado a casa, a jaladas de oreja.