La aparición de una terrible grieta en el edificio deriva en una búsqueda de responsabilidades por parte de Enrique y Antonio, que acaban encontrando a Jorge, el arquitecto que proyectó el edificio. Por su parte, el arquitecto se niega a pagar el arreglo de su bolsillo por lo que Enrique se plantea cómo solucionar el asunto: por las buenas o por las malas.