Devon y Conrad trabajan a contrarreloj para salvar la vida de una mujer que se está deteriorando rápidamente a causa de unos síntomas indeterminados. Cuando la paciente resulta ser una heroina que ayuda a ex-delincuentes a recuperar sus vidas, el equipo confía en su familia de ex convictos para ayudar a diagnosticarla y tratarla. Las tensiones aumentan a medida que Nic continúa su búsqueda de pruebas para incriminar a Lane, pero al mismo tiempo debe atender a su hermana, Jessie, que entra en la sala de emergencias. Mientras, York regresa al hospital con su madre, que necesita una operación arriesgada, y se encuentra cara a cara con el frío Dr. AJ Austin.