Un apagón en el hospital requiere que el personal trate a sus pacientes sin la ayuda de ninguna tecnología. Bell ordena al personal que deje de aceptar nuevos pacientes y traslade a los que reciben soporte vital, pero Conrad y Devon se saltan la orden cuando llega un niño y lo trasladan a urgencias. Mientras, Mina y Austin deben realizar una cirugía de corazón a un bebé prematuro, a pesar de la falta de electricidad, y Nic trabaja incansablemente para organizar al personal y los pacientes que permanecen en el hospital durante el apagón.