Por enésima vez, la madre de Zak no puede ir a casa por culpa del trabajo. La familia necesita el dinero pero Zak se niega a comprender lo y se desilusiona. Mientras entrena en la otra dimensión, Tänpo se percata de la tristeza de Zak y decide hacer un entrenamiento a solas con él en la dimensión Kaiju. Allí, subido a una nave, deberán destruir a un monstruo mecánico de los Zorn, el Senodonte pero sólo lo logrará si consigue dominar su poder: el disparo Zet-Sen. Para usar el disparo es necesario adaptarse a la situación. Finalmente, Zak acepta que, tanto en la Tierra como en la batalla, las cosas no son siempre como queremos y consigue destruir al monstruo haciendo el disparo. Por su parte, el Mariscal recibe noticias de la derrota y empieza a estar seguro de quién se esconde detrás de los últimos ataques a los Zorn.