Yusuke acepta el hecho de que no puede derrotar a Sensui. Observando pero incapaz de ayudar, Kuwabara lucha contra la emoción con rabia mientras recuerda todos los buenos y malos momentos que ha tenido con su mejor amigo. Kuwabara logra liberar a Kurama y Hiei, pero es demasiado tarde. Yusuke Urameshi ha sido destruido.