Rei sigue teniendo visiones relacionados con el Silencio y la destrucción del mundo. Todas deciden ir al planetario y llevar a Hotaru. Las sailor scouts exteriores hablan sobre el poder de Hotaru, además del enviado del mal, que es la sailor de la destrucción, su guardián es el planeta de la devastación. Deciden que si esa sailor va a despertar en ese mundo, hará lo posible para desaparecerla antes de que lo haga. Cuando las chicas llegan al planetario, las sailor exteriores están ahí y sienten la presencia de Hotaru. Setsuna habla con las chicas y les explica que la misión de las otras Sailor Scouts es acabar con el silencio que viene acercándose, el silencio es la destrucción del mundo. Setsuna les deja ver la premonición que Rei siempre ha tenido sobre la destrucción del mundo. Setsuna también les dice, que el enviado del mal es la última Sailor, y que ella no debe despertar, ya que despertara cuando sea el momento de la destrucción, pues es la representante de la muerte. Mimet libera el demonio para robar el corazón del narrador del planetario. Hotaru sufre un ataque y Rini quiere ayudarla, pero Sailor Uranus le pide que espere un momento para ver su poder. El ataque de Hotaru empeora y un símbolo aparece en su frente, lo cual demuestra que ella es una Sailor Scout. Después de que Sailor Moon derrota al demonio, las tres Sailor Scout Exteriores intentan atacar a Hotaru, Sailor Moon y Rini se interponen. Uranus les dice que Hotaru es la Sailor de la destrucción y que su planeta protector es Saturno el planeta de la devastación; además que cuando Sailor Saturn despierta, es porque será la destrucción del mundo. Plut explica que la única forma de salvar al mundo es matando a Hotaru. De inmediato, Hotaru desaparece de los brazos de Rini para aparecer en su recámara.