Es lo mismo cada vez. Ya sea como Marinette y Adrián o como Ladybug y Cat Noir, las identidades secretas de nuestros héroes siempre les impiden tener un romance. Tikki y Plagg lamentan ver a sus poseedores tan tristes por tener que renunciar a sus sentimientos. Entonces, los kwamis toman una decisión drástica que cambiará muchas cosas en París...