Kimble, que trabaja como aprendiz de velero en Santa Bárbara, California, se enamora de Karen, la hija de su severo pero compasivo jefe Lars Christian. Pero se gana el desprecio del celoso y sobreprotector hermano de Karen, Eric. Cuando Lars sufre un infarto, su último deseo en su lecho de muerte es implorar a Kimble que se quede con Karen. Mientras tanto, Gerard vuela a la cercana Los Ángeles cuando se entera del arresto de un hombre manco por robo a mano armada y deja que la historia llegue a los periódicos, con la esperanza de que Kimble se entere.