La policía de Miami persigue a dos ladrones que huyen a toda velocidad en un coche tras haber cometido un robo. Cuando los delicuentes llegan a un puente levadizo, concluye la persecución y todos asisten a una impactante escena: el cuerpo sin vida de Jake Richmond está colgado de la estructura. El equipo de Horatio se desplaza a la escena del crimen, donde descubren que la víctima recibió dos disparos en los ojos: todo apunta a que fue asesinado antes de ser ahorcado. Entre sus pertenencias, aparece una carta de una baraja de póquer, el comodín.