Habiendo rescatado a Koga de ser absorbido por Naraku y de ser sepultado bajo el monte, Inuyasha y los otros deciden perseguir a Naraku, quien se ha encontrado con Kikyo, revelándole que su verdadero objetivo con su nuevo cuerpo es sólo uno, tener la facultad de poder matarle, llegando Sesshomaru para presenciar los últimos momentos de Kikyo.