El Sr. Otonashi le ofrece a Godai un trabajo de tutoría para Ikuko, quien insiste en que si ella quiere tener un tutor, debe ser Godai. Godai está de acuerdo en que ve esto como una forma de enamorarse de Kyoko y de ganar un sueldo fijo. Kyoko comienza a preocuparse cuando los otros inquilinos ponen la idea en su cabeza de que Godai podría tener algo para Ikuko, y hace todo lo posible por resistirse a la idea de que Ikuko tenga un nuevo tutor.