Pese a ser víctima de una brutal paliza a manos de los hombres de Tullius, Batiatus consigue recuperarse en una semana. Mientras Tullius le envía un mensaje lamentando que rechazara su oferta para comprar a Gannicus, el joven planea cómo vengarse de su rival. Batiatus consigue asegurar la primera posición para su luchador Gannicus en los próximos juegos de Vettius gracias a un minucioso plan: Quintillius Varis tiene previsto viajar a Capua para seleccionar a los gladiadores de los juegos y Gaia, que conoce bien al noble romano, lo invitará a la villa de Batiatus, donde éste hará todo lo que esté en su mano para impresionarlo. Mientras, Doctore se siente profundamente decepcionado ante las críticas que recibe de su amo Batiatus, que le comunica que a partir de ahora Oenomanus ocupará su lugar en el ludus. Incapaz de asumir su nueva situación, decide retar a Oenomanus en duelo.