Tirso se dispone a vigilar de cerca a Irene después de la decepción que supuso que se aprovechara de sus buenas intenciones para intentar robarle su dinero y escapar. Sin embargo, sus sospechas sobre lo que realmente ocurrió la noche que fue asaltada le harán ponerse en marcha para averiguar la verdad. Mientras, Amanda suspende a Ezequiel y le sanciona porque está convencida de que trabaja para Sandro.