Stan decide preparar una cita a ciegas entre Bullock y una amiga de Francine, pero después de que ésta le insista en que su plan está destinado al fracaso, Stan, que odia oír a Francine diciéndole "ya te lo dije" más que nada en el mundo, decide asegurarse de que la cita vaya bien - y se encarga de ello emborrachándoles. Pero cuando Bullock mata accidentalmente a la chica, Stan se ve obligado a encubrirlo y culpar a Francine.