Cuando Stan descubre que Francine tiene un jardín erótico secreto, siente que su matrimonio podría estar en peligro. En un intento por recuperar el romance, Francine insiste en un divorcio para que Stan pueda volver a experimentar la vida de soltero, y ambos aprendan una valiosa lección en el amor. Mientras, Steve se engancha a una nueva bebida energética y termina pidiendo por las calles para mantener su adicción.