Steve está en viaje de negocios fuera de la ciudad y Marcy empieza a tener sueños eróticos con Al, algo que no sólo la perturba sino que la deja francamente desmoralizada. Cuando se lo cuenta a Peggy, esta responsabiliza a Al. Lo peor de todo es que, cuando Steve regresa a la ciudad, Marcy vomita cada vez que intenta acercarse románticamente a ella, ya que su modo de actuar es exactamente igual al de Al en sus sueños. Steve, al igual que Peg, culpa a Al de la situación.