Al invita a Steve a que se le una con sus amigos en la partida de póquer de los viernes. A Steve no le gusta jugar, pero cree que sería una buena manera de conocer gente, de modo que acepta. Finalmente, acaba por animarse y entra en la timba, pero pierde 300 dólares que van a parar al bolsillo de Al. Era su parte destinada a la hipoteca, y ahora no sabe cómo explicarle a Marcy que lo ha perdido, por lo que le pide a Al que se los devuelva, pero éste se niega.